Todos contra la droga, pero nos beneficiamos de ello

Estados Unidos se ha propuesto ayudar a México, pero claro, como americanos, lo hacen a su manera. La iniciativa del George W. Bush, para luchar contra el contrabando de droga, ha desatado las iras en el Congreso mexicano. La ayuda de Estados Unidos a México para la lucha contra el narcotráfico, anunciada el lunes por el presidente norteamericano, bajo el título de «Iniciativa Mérida», podemos calificarla, cuanto menos, como «especial».

En la tarde del pasado miércoles en el Congreso de México se respiraba un ambiente, que podemos definir como extraño. Patricia Espinosa, responsable de las RR. EE. mexicanas, estaba obligada a explicar el plan norteamericano al auditorio, ante el recelo de los parlamentarios, acerca de esta nueva cooperación económica y estratégica de los dos países

Este plan, para luchar contra el narcotráfico, entre ambos países, expone como base, el transvase de 7.000 millones de dólares, para que los dos gobiernos puedan reforzar la defensa e impedir las transacciones. Obviamente, al hablar de este dinero, en particular, queremos decir que éste saldrá de las arcas centroamericanas.

Sin embargo, con respecto a este tema, los grupos parlamentarios mexicanos se muestran poco receptivos. Los conservadores del Partido Acción Nacional (PAN), y los progresistas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) coincidieron en su negativa. Literalmente, los primeros aseguraron que «esta Cámara no aprobará ninguna partida para este propósito» y los segundos que «quienes autorizan el Presupuesto son exclusivamente los diputados». A pesar de los movimientos a favor de esto, la mayoría son contrarios.

Estamos hablando de un tema tan delicado que, quizá, hablar de partidas económicas, de las que el Gobierno norteamericano, sospechamos, desea beneficiarse, le hace un flaco favor a la lucha contra el narcotráfico. El más poderoso debe aportar más y, en este caso, quizá los estadounidenses deberían aportar el 100%. Pero claro, allí, se ve de otra manera, si se puede llamar manera.

(Imagen:www.swissinfo.org)